11.7.09

sábado de 5 a 11

Me llama la Javi, te invito a comer. Viene al depto, me ducho. ¿No te vas a secar el pelo?. No, filo.

Le cuento que hace un mes dejé de ser vegetariano (después de seis años). Caminamos al Brixton pero diez pasos antes nos metemos al Junta Nacional ¿Un crudito? Ya poh.

¿Siete años sin comer crudo? Llega la Piri que se sienta con nosotros. Javi me tengo que ir corriendo al Arte Alameda, voy a ver una película con Fredes y su hermano, Fredes.

Son unas seis cuadras así que corro. El crudo me pesa. Llego y la fila es enorme. Se llenó. Encontramos dos puestos en primera fila, y uno solo detrás. Roto. Me las ingenio, uso la luz del cel, arreglo el asiento. El tipo de al lado me felicita diciendo "dos días enteros de festival y nadie lo había intentado arreglar". Le cuelga una credencial. ¿Es del jurado? No, soy el director de la escuela de cine de Chile. Pienso en que pensaba que los directores de escuelas de cine serían más chic y cliché, en el momento justo en que se apagan las luces.

El cortometraje de la promesa del cine de la PUC (La Montaña), malito. El cortometraje siguiente (La Cazuela) bien bueno. Y finalmente la película que queríamos ver: "te creís la más linda, pero erís la más puta". Muy buena. Actorazo. Y de no ser por el final (es que en verdad difícil hacer un final para esa historia) la habría encontrado redondita. 4 de 5 estrellas me dice Fredes que le hubiera puesto en caso de haber sido crítico de cine.

Tomamos un taxi, que en 700 pesos nos dejó afuera de nuestro edificio. Ellos preparan la cena (yo escribo esto), una tortilla de verduras, tomaremos del vino que compré el otro día en el supermercado y verificaremos cuán distinto es el tomate del Líder comparado con el de la feria de los viernes en la mañana que se pone a tres cuadras del departamento.





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